El poema es un guiño a la célebre composición de Espronceda “El Sol”: “Para y óyeme ¡oh sol! Yo te saludo”. Nuestro Centro tiene tanta luminosidad que es como si el sol nos estuviera siempre mirando. El sol es feliz observando a nuestros alumnos y, para ellos, nunca se pondrá.
Nuestros alumnos se enfrentan a las dificultades, los espinos del camino, que no podrán con ellos porque lucharán siempre para vencerlas con tesón y sin perder nunca la dignidad.
Con el estribillo (yo soy el Ruta, mis padres son el Ruta) queremos destacar que nuestro Centro no es de los profesores: lo importante son los alumnos y los padres, queremos que todos estemos integrados en nuestra comunidad educativa, todos tenemos los mismos intereses y trabajamos juntos para conseguir nuestras metas.
El poema destaca también valores como la libertad, el espíritu de superación, la amistad entre compañeros, el afecto después de terminar los estudios…
Si te gusta y quieres participar, mándanos tu video a info@colegiorutadelaplata.es (grabado en HORIZONTAL) cantando la canción y haremos un montaje con todos vosotros.